¿La vulnerabilidad emocional es algo bueno? ¿Puede ayudarnos a los hombres si la practicamos? ¿Nos liberaría de alguna forma?
En este post, te hablo acerca de un tema que considero extremadamente importante en la salud mental de los hombres.
¿Qué es la vulnerabilidad?
El término ha sido asociado a diferentes cuestiones a lo largo de la historia, como por ejemplo: miedo, sensibilidad o delicadeza.
Sin embargo, nos sigue quedando la duda: ¿Qué significa entonces ser vulnerable emocionalmente?
Podemos definir vulnerabilidad emocional al estado mental que experimenta una persona cuando se siente expuesto ante situaciones o circunstancias que pueden herirlo o causarle malestar.
En otras palabras, ser vulnerable emocionalmente hace referencia a la capacidad emocional que tiene todo ser humano para abrirse ante sus semejantes y hablar directamente de sus sentimientos o emociones, que pueden ser enojo, miedo, impotencia, frustración, felicidad, alegría, bienestar, etc.
Significa ser transparentes con nuestra situación emocional, sea buena o mala. Poder mostrar nuestro verdadero yo ante la sociedad.
¿Los hombres practican la vulnerabilidad?
Por más increíble que parezca, no encontré artículos que me dieran estadísticas importantes acerca de este tema, solo algunos posts pequeños con opiniones; sin embargo, podemos inferir por la lógica y por las experiencias que tenemos todos los hombres (al menos en latinoamérica) que la respuesta es no. Los hombres no praticamos la vulnerabilidad.
Pero ¿por qué pasa esto?
Hemos nacido en una sociedad en la que -aunque está cambiando poco a poco- ser vulnerable, débil o emocional, es considerado como algo negativo, pero esto solamente aplica para los varones.
Los varones constantemente tenemos que ser fuertes, guardarnos lo que nos duele, salir adelante solos y poder hacernos cargo de todos nuestros problemas sin buscar ayuda interna.
Sin embargo, nos queda la pregunta: ¿esto es realmente favorable para la salud mental de los hombres?
¿Cuáles son las consecuencias de no ser un hombre vulnerable?
Los hombres nos hemos caracterizado por esconder nuestros sentimientos, que en diversas ocasiones pueden ser tristeza, preocupación, miedo, enojo, decepción, entre otros.
Esto lleva a un patrón negativo para nuestra salud mental, dado que posteriormente buscamos formas de lidiar con esto para intentar erradicarlos. Formas que pueden llegar a ser dañinas y nocivas, no solo para nosotros, sino también para todos los que nos rodean.
¿En qué se traduce esto?
En mi búsqueda acerca de artículos de opinión e informes, no encontré datos de gran importancia, pero hay una estadística que sí encontré, y que al leerla, me dejó la piel helada y la cual está íntimamente relacionada con este tema.
Según cifras del INEGI (Instituto Nacional de Estadística y Geografía), en 2021 se registraron 1,093,210 fallecimientos en el país, de los cuales, 8,351 ocurrieron por lesiones autoinfligidas. Lo anterior significa que la tasa de suicidio es de 6.5 por cada 100 mil habitantes.
Y aquí es donde viene la parte de terror: ¿Sabías tú que de acuerdo a estas cifras, la tasa de suicidio en los hombres es de 10.9 por cada 100 mil habitantes (6.785) y para las mujeres es menor, puesto que representa un 2.4 por cada 100 mil habitantes (1,552)?
Aquí te dejo el enlace al estudio del INEGI
¿Qué nos dice ésta estadística?
La respuesta es obvia: Hay una crisis grave en la salud mental de los hombres de la cual no se está hablando, o se está hablando poco.
Esto quiere decir que la represión de sentimientos, la falta de apoyo emocional y de apertura sentimental, nos está llevando a una situación crítica de enfermedades mentales como la ansiedad y depresión.
Sin embargo, hay una respuesta que puede ayudarnos a todos los hombres y es permitirnos ser vulnerables.
Pero ¿cómo puedo ser vulnerable siendo hombre?
Antes que nada, tenemos que quitarnos el estigma que trae aparejado el ser vulnerable, que normalmente se asocia con ser débil o sentimental.
Es totalmente opuesto. Ser vulnerable significa ser un hombre, puesto que estás aceptando tus estados emocionales y abriéndote ante tus semejantes para cambiarlos. Significa tomar responsabilidad de tu vida y creo que no hay nada más masculino que esto.
Pero ser vulnerable requiere de un gran coraje y fuerza, dado que es esencial abrir tu mente y corazón para hablar de aquello que no te está dejando dormir, aquello que te preocupa, aquello que te duele, aquello que te avergüenza. Y la mayoría de los hombres no estamos acostumbrados a eso.
¿Qué pasa cuando comienzo a ser vulnerable?
A pesar de todo, las veces que yo he sido vulnerable y me he abierto con otros hombres acerca de mis sentimientos, he entendido que muchos de nosotros estamos en la misma situación: todos tenemos o hemos tenido alguna etapa emocional de altibajos, pero casi nadie la conoce, porque nunca conversamos acerca de ello.
Sin embargo, cuando he hablado de mí y he escuchado las historias de otros hombres acerca de este tema, es cuando más identificado y menos solo me he sentido. En esas ocasiones es cuando he forjado grandes amistades con otros hombres.
Conclusión
Pienso que hay mucha masculinidad y coraje en ir a tumba abierta con tus sentimientos, en expresarlos y en pedir ayuda cuando es necesario.
Una de los objetivos de la masculinidad es hacerse responsable de los estados mentales de uno mismo, y eso significa muchas veces reconocerlos, aceptarlos y buscar cómo cambiarlos.
Pero si no nos abrimos ante el mundo, ¿cómo podrán conocernos realmente y cómo podremos encontrar a una persona que ha sufrido una situación parecida y que puede ser un apoyo en estos momentos?
Te animo a quitarle el estigma a la vulnerabilidad masculina, a abrirte completamente ante el mundo y a inspirar a otros para que hagan lo mismo.
No podemos vivir siempre detrás de una careta, detrás de una sonrisa fingida o de una pose de fortaleza. Somos seres humanos y éstas experiencias son totalmente aceptables y normales en nuestra experiencia terrenal.
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-Adrián de la Vega.
