Nota del autor: Estas publicaciones se presentan tal cual fueron escritas, sin ediciones, para preservar la autenticidad de los pensamientos del autor. Agradezco su comprensión ante cualquier error ortográfico o gramatical.
¿Cuál es mi objetivo al escribir?
Conectar con mis semejantes, es decir, con todos los seres humanos que se tomen el tiempo para leerme.
Porque cuando retomé la lectura hace algunos años, me encontré con autores cuyas obras hacían parecer como si me estuvieran hablando directamente, haciéndome sentir cosas nuevas y mostrándome respuestas a muchas de las preguntas que atormentaban mi juventud.
Me parecía increíble como palabras escritas incluso hace años, podían hacerme sentir el estado de ánimo del personaje principal, me podían transmitir sabiduría o podían hacerme entrar a un mundo fantástico, y quedé totalmente fascinado.
Desde ese momento, mi objetivo ha sido escribir algo, pero no cualquier cosa, escribir obras que dejen algo positivo al lector, que dejen algo parecido a lo que a mí me dejaron todos los autores con los que me relacioné.
Por eso, cada vez que alguien me dice: «me dejaste pensando», «me identifiqué mucho», «me hiciste dudar algunas cosas de mi vida», «me divertí con tu historia», para mí, es música para mis oídos.
Poder transmitir mis sentimientos, mis pensamientos y mis conocimientos me hace sentir realizado y siempre ha sido mi objetivo número uno al escribir en este blog.
Porque me siento feliz cuando escribo, me divierto y me conecto con una parte muy profunda de mi ser que no muchas veces sale a relucir.
Y si hoy muriera, me quedo tranquilo porque en el fondo de mi corazón, sé que por lo menos una, aunque sea una sola persona, apreciará todos los escritos que he dejado atrás.
No le doy mucha promoción a esto, pero a veces sueño con que después de algunos años de mi muerte, alguien encontrará el blog y dirá: «¡Vaya! Era un escritor talentoso y con ideas buenas acerca de la vida».
-Adrián de la Vega.
